Shakespeare escribió: En todas las universidades y centros de estudios de Cine, Leonardo Favio merece un capítulo aparte. En particular, Crónica de un niño sólo y El Romance del Aniceto y la Francisca, dos films que recuerdan al mejor neorrealismo italiano de los años 50. Un lujo haciendo cine. Sus últimos films fueron flojos. Pero la primera parte de su filmografía, gloriosa. Que en paz descanse.
Crónica... no aguanta el paso del tiempo. El lamparón en los interiores, los fuera de foco, la miseria sórdida sin picardía, la solemnidad deprimente de Los 400 Golpes en vez del costumbrismo de comedia dramática de Los Olvidados.
Lo mejor para mí es Juan Moreira y Gatica. Después, Soñar, Soñar y Nazareno Cruz, que es más lenta y su leyenda pagana cristianizada ridícula y con pretensión de seriedad, como las pavadas de vampiros para adolescentes. En las 4, los actores son malísimos, pero actuaron bien; en las 4 contó historias épicas, pero con poca guita y -por eso- con una sola cámara y en 100 minutos o menos (excepto Gatica, que es más larga). Leonardo Favio quería hacer un cine popular, como el norteamericano viejo, pero con puestas de escena italianas y temas argentinos.