Estimo que al menos afuera por lo menos hay reglas claras y además opera en una moneda fuerte, o sea que las ventajas son muy apreciables.
Acá no solo es muy confuso (como el tema de ajuste por inflación donde vemos empresas que en sus balances pagan impuesto a las ganancias y en el mismo figura pérdida) y además te cambian las reglas de juego en mitad de la jugada como en el caso de la disposición del Banco Central que impide a los bancos pagar dividendos.
Totalmente decepcionado del mercado argento.