Máximo escribió:A mi modesto entender, un proceso de recompra en medio de un mercado bajista no es motivo para que el papel suba. Distinto sería si el mercado, en general, fuese alcista o lateral. De manera que tanto la cotización de COME como del resto dependerá de la evolución general, más allá de los precios y condiciones particulares de las especies, muchas de las cuales, Come incluida, pueden considerarse a precios de oportunidad para un inversor largoplacista SIEMPRE Y CUANDO las variables económicas se estabilicen y las inconsitencias macroeconómicas se resuelvan o al menos tiendan a ello. En este aspecto, después de seis meses percibo algunos cambios en la conducción que, sin descollar ni constituir una solución definitiva y de fondo, alientan una pequeña esperanza. Hoy por hoy la política monetaria y fiscal parecen ser convergentes, luego de haber mostrado fuertes asimetrías desde el comienzo de esta administración. Y esto es muy reciente, apenas ayer el Directorio del BCRA anunció ciertos cambios que, si bien no están del todo claros, apuntan en una dirección que parece ser la de un diagnóstico más atinado. El diagnóstico original de Macri y su equipo quedó demostrado que estaba muy equivocado. Y la gestión de la política económica también. Parecería ser que ahora eso cambió. Y tiene el gobierno los instrumentos para llevar adelante los cambios: el ajuste del presupuesto puede hacerlo, llegado el caso, sin necesidad de recurrir a un acuerdo con el peronismo. Otro punto a favor muy importante es que mostró Macri que, en medio de la crisis, optó por no tomar medidas "kirchneristas", sino que resolvió acorde a lineamientos generales de una economía más alejada del populismo. Con todo esto, haciendo números, si Macri se anima a hacer los ajustes anunciados es esperable (salvo que se agrave mucho el panorama internacional) que el año próximo se nos vuelva a abrir el mercado externo de deuda (ellos dicen que no lo van a necesitar, pero el mercado duda). De resultar todo así, sobre todo en el plano del ordenamiento fiscal, las tasas tanto de interés como de inflación deberían tener una fuerte baja en 2019 y posiblemente ya a partir del último trimestre de 2018. La sangre, entonces, no llegaría al río, crecerían las posibilidades de reelección de Macri y nos desayunaremos con que los niveles actuales fueron una gran oportunidad de compra. Es difícil. La situación sigue estando muy complicada. Pero bueno, por eso mismo las cotizaciones están en los niveles que están. La principal señal a mirar ahora, más que las cotizaciones de las acciones o si Noel compra mucho o poco, es la paridad de los títulos en dólares, o sea, la evolución del riesgo país. La guita grande, el smart money, está principalmente ahí. Sólo una opinión.
Después de varios fracasos, resultó un éxito la colocación de Letes y Bonos Dual de hoy a la tarde. Si bien la prensa económica aún no lo refleja, el mercado parece ver con mejores ojos los cambios que señalábamos hoy a la mañana. La hemorragia parece haberse detenido y el escenario luce más estable. Las paridades de los bonos están teniendo otra dinámica: los días de suba se mueven con mayor holgura que los días de baja. En términos de AT diriamos que el RSI vuelve a apuntar al norte después de una fuerte caída producto del sell off sufrido. No es mucho, pero tampoco son señales desechables si asumimos qué tan cerca del precipicio estuvimos y seguimos estando. Todo con pinzas, pero un poco mejor.