Mensajepor Tecnicalpro » Mar Sep 10, 2019 6:57 pm
DECLARACIONES DE NICOLÁS ARCEO EN FLACSO
El gas debería aumentar 66% solo para acompañar la suba del dólar de este año.
El ex vicepresidente de administración y nanzas de YPF aseguró ese debería ser el ajuste
si se respeta el marco regulatorio actual. Sostuvo que el desafío es encontrar la manera de
garantizar la inversión sin que todo el peso recaiga sobre el consumidor.
El ex vicepresidente de administración y nanzas de YPF, Nicolás Arceo, aseguró que con el esquema regulatorio actual el
gas debería aumentar 66% en la próxima revisión tarifaria solo para acompañar la devaluación del peso registrada este
año. “El cuadro tarifario acordado por las distribuidoras a comienzos de 2019 contemplaba un precio de 4,7 dólares por
millón de BTU. Si el tipo de cambio termina en torno a los 65 pesos por dólar, el valor del gas natural para distribuidoras en
el mercado local se va a ubicar en 2,9 dólares el millón de BTU en diciembre de 2019. Esto plantea que, de mantenerse los
marcos regulatorios actuales y de intentar retomar un valor del gas de 4,7 dólares en la revisión tarifaria que se tendría que
hacer en enero o abril de 2020, el incremento de las tarifas de gas natural alcanzaría el 66%”, explicó Arceo, uno de los
consultores más consistentes en materia energética, al exponer el jueves en el IV Congreso de Estado y Políticas Públicas
realizado en la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso) donde compartió mesa con el ex titular de Enargas,
David Tezanos y con la gerenta general de Excelerate Energy, Gabriela Aguilar.
Arceo, doctor en Economía formado en la UBA, jugó un rol estratégico en la YPF que presidió Miguel Galuccio, validando con
el gobierno nacional algunas decisiones clave de la gestión energética entre 2012 y 2015, como la creación del Plan Gas (que
recompuso la señal de precios para el upstream de gas) y el descongelamiento del precio de combustibles, que permitió el
incremento del precio interno del petróleo a n de promover la inversión en Vaca Muerta.
Arceo dejó entrever que no existe viabilidad social para aplicar una recomposición tarifaria de esa magnitud. El próximo
gobierno deberá, frente a ese contexto, determinar si mantiene el esquema de actualización tarifaria previsto en el marco
regulatorio actual, a n de impulsar la inversión en el sector de gas o, por el contrario, avanza con un congelamiento de
tarifas para mejorar la situación y los ingresos de los consumidores. “Mostrar estos casos polares invita a pensar que la
resolución se va a dar en un punto intermedio”, armó. “Es central que Argentina mantenga el abastecimiento del valle de
verano en términos de producción gasífera. Costó muchos recursos e ingresos de los consumidores recuperar la
producción de gas desde 2013. Y creo que uno de los objetivos centrales de la política energética debería ser garantizar los
actuales niveles de producción para que sirvan de base a un crecimiento exportador”, remarcó.
En esa línea, agregó que “el crecimiento de la producción gasífera en Argentina necesariamente deberá estar asociado a la
instalación de terminales de licuefacción para exportación y, más allá de un exceso de oferta en los próximos dos o tres
años, el mercado internacional de GNL va a tener demanda para una producción incremental desde nuestro país”.
Ubicada en el hemisferio sur, Argentina tendría posibilidades de competir con el GNL no convencional proveniente de
Estados Unidos por su ventaja geográfica y porque cuenta con menores costos de transporte. “El debate que opone el
abastecimiento del mercado local a la exportación queda en segundo plano. Argentina tiene un nivel de recursos de gas
natural que permitiría garantizar el consumo local por 468 años”, señaló el ex YPF. “Con un costo de GNL en torno a los 7,9/
8 dólares por millón de BTU- descontados los costos de trasporte y licuefacción-, un productor argentino podría percibir 3,8
dólares por millón de BTU”.
A raíz de ello, durante la conferencia se plantearon los problemas que trae aparejados la exportación de gas natural. En
primer lugar se habló de la necesidad de establecer un marco regulatorio para compatibilizar el abastecimiento de la
demanda local con un proceso de exportación continuo a través de las terminales licuefactoras.
Fuente Econo Juornal