Mensajepor quique43 » Jue Oct 09, 2014 1:46 pm 
			
			
			
			Báez es el Lazarillo que los Buitres usan para cobrar su deuda
09/10 – 09:15 – No hay nada más exacto que el viejo dicho el cual expresa “hay que pegarle al chancho para que aparezca el dueño”. Los fondos Buitres están amenazando sacar a la luz, la verdadera “ruta del dinero” (no la de Casanello) y esto lleva, irremediablemente, a que exista una sola respuesta del gobierno nacional. El problema es que por este camino, Cristina Fernández va a sufrir el síndrome de la frazada corta. Una encrucijada que plantea un dilema shakesperiano. Por ahora solo pasan el aviso. ¿Chantaje? ¿Extorsión?. No, solo quieren cobrar. (Por: Rubén Lasagno)
Las noticias en cuentagotas, sobre el avance de los fondos Buitres en la investigación de los activos que involucran a Lázaro Báez, como supuesto favorecido por la obra pública, que habría generado millonarios fondos de dólares dispuestos en el exterior, como producto de la corrupción, es una estrategia de presión que están jugando los que de esto saben mucho, que son aquellos capitales especuladores, dedicados a producir ganancia con la necesidad (en este caso) de los países y aprovecharse de las debilidades que todo “cliente” tiene en épocas de sequía. Ese es su objetivo y lo cumplen a rajatablas. ¿Por qué con Argentina tendría que ser distinto?
Según contó Clarín ayer más temprano y amplió muy bien después Perfil.com, los Buitres baten los parches sobre el entramado K que cosió los dólares y los euros fuera del país, en una enmarañada trama de bancos y financieras, donde cuesta seguir el hilo conductor y encontrar los verdaderos responsables, pero, con la ayuda de los dispuestos holdout, es probable que el trabajo que nunca se tomará la justicia argentina, de encontrar el dinero y los responsables, deje al descubierto la intrigante ruta, merced a las revelaciones de los Buitres.
¿Qué está pasando, entonces?, simplemente que los Buitres baten sus alas tratando de que se despierte el dueño del chancho; es decir, en la medida que no les paguen, los datos se irán filtrando, cada vez más comprometedores y cada vez más cerca del poder central ergo: el gobierno nacional; y esto, en el umbral de un año electoral, no le conviene al kirchnerismo.
Perfil señala “los bancos LGT Bank de Lichtenstein y los suizos PICTEC; Schroder & CoBank AG y AIG Private Bank, figuran en la ruta de lavado de dinero de Baez. Otras 18 entidades bancarias estarían involucradas, aunque por el momento no informaron cuáles son” y agrega “los fondos que salen del país por Uruguay, Panamá, Belice y las Islas Virgenes, se transfiere a bancos pequeños en Bahamas para convertirse en dólares e ingresar al sistema internacional bancario”.
Hasta acá es como si se hiciera un “sobrevuelo” sobre la ruta del dinero, sin mayores profundizaciones, ni datos puntuales, lo que suena casi como la “preparación del terreno” para lo que vendrá, si acaso el gobierno insiste en no pagar la deuda con los fondos en el exterior.
Finalmente Perfil, refiere “Desde Bahamas, los dólares van a Estados Unidos donde empresas controladas por Báez en Nevada acumulan activos sudamericanos. Los fondos se depositan en los bancos de Liechtenstein y Suiza, y según indican desde ATFA, “muchas probablemente pertenecen a entidades en las islas Seycheles”.
Punto; casi un mensaje elíptico: “Islas Seycheles”, es como decir la Meca. Y allí termina esta historia relatada “a vuelo de pájaro”, encendiendo las dudas de si habrá más, o solo esto es para asustarlos… a quién?, al gobierno, claro.
El problema que esto le genera al gobierno y a la presidenta, especialmente, es que si no paga, corre el riesgo, como todo indica, que la información seguirá apareciendo y la meta final, es embarrar el apellido Kirchner, en medio de una investigación que no puede ni está en capacidad de detener nadie, excepto los Buitres.
Si el gobierno busca un arreglo urgente para detener esta hemorragia de información incontrolable, quedará expuesto a dos problemas: uno, no sabrá explicar dónde se guardará toda la campaña en contra de los maléficos Buitres y dos, demostrará que tiene sumo interés en ocultar la verdad de la ruta del dinero, demostrando expresamente con este acto, que la presidenta está involucrada en los ilícitos de lavado de activo a través de los negocios de Báez.
Es decir, el empresario K de la construcción es un lazarillo que usan los Buitres para cobrar sus acreencias y a Cristina Fernández, la frazada le queda corta; si elige no pagar debe enfrentarse a la información que derramarán los Buitres y si paga, apurada por las circunstancias, quedará en evidencia que es culpable.
El mayor problema para el gobierno es que la acción extorsiva y de chantaje que enfrenta, no la puede controlar y ni siquiera moderar. Los Buitres le pegan al chancho esperando ver al dueño y no hacen más que devolverle en especie, el mismo chantaje y extorsión que usa el kirchnerismo a quienes puede controlar fronteras adentro.
En un punto, el gobierno y los Buitres están hechos de la misma pasta y buscan sus objetivos con los mismos recursos. (Agencia OPI Santa Cruz)