Si alguien dudaba sobre la desconexión del mercado local en relación con lo que sucede en el mundo, la rueda de ayer fue la muestra más cabal de esta situación. El índice Merval subió menos del 1%, muy lejos de lo que marcaron otras Bolsas de la región, Wall Street o Europa. Claramente las acciones están contaminadas por la presencia cada vez más fuerte del Estado en distintos sectores de la economía. Tras la decisión del Gobierno de participar en el mercado de la telefonía celular, Telecom cayó ayer otro 5,7% y acumula una merca de casi un 10% en dos días. También cayó Siderar, que perdió un 2,19%, producto del contrapunto entre el ministro de Planificación, Julio De Vido, y el presidente de Techint, Paolo Rocca. No son las únicas afectadas. Los bancos no reflejan en los precios su verdadero nivel de utilidades debido a la imposibilidad de girar dividendos y las compañías de servicios públicos no levantan cabeza ante la imposibilidad de subir tarifas.
Por eso, el Merval es uno de los pocos índices del mundo que medido en dólares se mantiene negativo en el balance anual.http://www.ambito.com/diario/noticia.asp?id=653378