ROP escribió:Bien Kenshi. Es por ahí. Por ahí va el camino que tiene salida. Pero es difícil si uno no asume que el único responsable de lo que hace es uno mismo. No hay excusas. Nunca hay que buscarlas. Acá no te dormís, ni hubo un paro de trenes, ni se enfermó mi suegra, ni tengo una contractura.
Acá jugas al póker, en una mesa gigante. No le podés preguntar al de al lado: Ché, qué te parece. Mirá lo que tengo. Levanto? te imaginás en una mesa dónde un tipo pregunte eso. Cuál sería la respuesta. Juntá las fichas y tomate unos martini en la barra.
Además, a la Bolsa hay que acercarse como los indios hacían con los caballos cuando los domaban. Ellos nunca los domaron con la violencia. Se acercaban con muchísima paciencia. Se hacían parte del paisaje. Hasta que el caballo los reconocía. Luego, se acercaban más y más. Lento, muy lento. Hasta lograr tocarlos. Acariciarlos. Caminar con ellos. Después, de mucha paciencia, montarlos. Exactamente así, es la Bolsa.
No hace mucho en Animal Planet dieron una serie llamada Domador de Caballos, con un argentino que usaba esta técnica. Increíble lo que lograba.
Acá el acercamiento es estudiar, estudiar, probar, probar, mejorar. Lento. Muy lento al principio.
No se le puede pedir de golpe a la Bolsa que te dé lo que en otra actividad lleva diez años de preparación. Cuestión de simple lógica. No se puede invertir y querer vivir de ella de una.
El indio no se acercaba corriendo al caballo. Lo que lograba era espantarlo. Más lo corría, más corría el caballo. Hasta que se dio cuenta.
Así de simple, así de claro. Lo demás: VERSO sin rima.
Muy bueno Rop