Hablando de gente del Paraguay, ahí va otra historia.
Resulta que tengo un amigo divorciado que vive solo, contrato a una mujer paraguaya para las tareas domesticas.
One tarde, vuelve del trabajo y estaba planchando en la cocina sobre una mesa que dejaba solo un poco de lugar entre la misma y la pileta, cuando pasa por atrás hacia la heladera la mina se inclina para agarrar una ropa rozando el pene/tujes, oia dice que le pasa a esta y quedo ahí. A la semana vuelve de trabajar y la mina le dice lo noto muy cansado, necesitaría unos masajes, " si, la verdad que si", si quiere le hago, yo hice un cursito y bue "dale nomas", termino haciéndole un pete y como costumbre casi todos los días que llegaba de trabajar, después se volvió al Paraguay, todavía la extraña, jajja
