Hay que reconocerles a los mileistas su gran capacidad de festejar, de sentir felicidad, admiración y arrobamiento hacia cualquier minucia, mínimo acierto o fugaz mensaje esperanzador o elogioso por parte de EEUU. Realmente esa capacidad de resiliencia y optimismo, es envidiable. Son felices con muy poco, y no se amargan pensando en el lado negativo que puede acarrear algún que otro pequeño pifie de parte del leon. Ayer festejaban como grandisimo logro del Gobierno, que Trump le otorgara un importante préstamo para ayudarlo a zafar del grave atolladero financiero en que se encontraba, y que le entregara al Javo un papel con un mensaje de felicitación y apoyo moral. Festejaban y vitoreaban que la Bolsa después de bajar un 40% en el año, rebotaba un 6% o más aun en los bonos.
En los libros de autoayuda , siempre nos dicen que cada fracaso o derrota o penuria, la debemos tomar positivamente, con fe y optimismo, ya que nos otorga un aprendizaje, una enseñanza, y una guía para nuestro futuro crecimiento. Y evidentemente las huestes del leon, aplican fehacientemente esta teoría. Muy bien por ellos.
