udA escribió:La diferencia es que en general, el dueño de una PYME, que se rompe el lomo como decís, entiende que es un problema estructural del país, y que va más allá de Macri o Cristina, porque la estructura es la misma.
Yo fundí, hice percha, o más bien, me hicieron percha, tres empresas, tres!
En cualquier país sería tratado como un fracasado... Tres empresas? Como fundis tres empresas? En Argentina es muy común, y hay que arrancar de nuevo, una y otra vez, porque las cuentas no salen, más allá del consumo te hablo.
Mi primera empresa la fundi en una de las hiper, me llevó puesto mal, muy mal, de la noche a la mañana colapsaron los números, y fue feo, porque era la primera.
La segunda, como olvidarlo, contrate a una persona y la cite un lunes, no vino, vino el martes, trabajó como puede trabajar una persona que acaba de empezar, el miércoles no vino, volvió el jueves, el viernes vino al medio día, y el lunes siguiente tenía una denuncia por acoso laboral, y por trabajo en negro, cuando en realidad estaba blanqueado, pero el y su abogado afirmaban que trabajaba en mi empresa hace cinco años atrás, y bueno, pese a la declaración de otros empleados, nada... A los seis meses, seis meses, resuelto el juicio a su favor, y nada, colapso porque la justicia encima consideró que había dolo, en fin...
La tercera si fue una mala planificación mía, eso sí, pero en realidad era un negocio que era muy a largo plazo y no le dediqué el tiempo necesario, y bueno, lo cerré con muchas pérdidas.
Este país es muy ingrato en muchas cosas, y van más allá de Macri o Cristina, es estructural el problema, el gastar más de lo que se ingresa, el vivir por encima de nuestras posibilidades, llamalo como quieras.
Entiendo que hay sectores que dependen exclusivamente del mercado interno, del consumo, etc, pero a la larga, el problema sigue siendo estructural.
En un país con gran economía difícilmente fundás una empresa medianamente bien administrada, porque todos están empleados, hay consumo y hagas lo que hagas vendés. Por supuesto que para lograr eso hay políticos que afanan menos, defienden lo nacional y no hay una polarización extrema.