Fabricio escribió:Gracias por el aporte Lestat. Entiendo que son inversiones a largo pero no rotar la cartera no fue bueno para mi. Luego de las paso, donde para mí tranqui le saca un 10% Fernández a Macri puede ser una oportunidad de pasar un poco de este cedear a Cepu. cuando Cepu era lejos mí mayor inversión se fue arriba de 20 y está valía menos de 4, al mismo valor en unas semanas me parece que hay que arbitrar.
Sí, rotar la cartera siempre tiene sentido... En mi caso, creo que tengo la idea de rotar disminuyendo el riesgo, es decir, tomar ganancia de un activo riesgoso y reinvertir en uno menos riesgoso, siempre que fuera posible. Le agarré el gusto a ir armando posición en algunos "blue-chips" que siempre dan la impresión de estar caros, pero que a la larga el retorno total (dividendos más apreciación) es tranquilamente un 8% que no está nada mal.
Ahora sí, para el evento que vos decís de que FF gana por mucho en 2 semanas, es posible que el mercado local esté muy (pero muy!) ofrecido, en principio porque es cierto que un gobierno de Alberto afectaría las ganancias (por uno o dos años) de muchas cotizantes sobre todo bancos (ya habló de recortar tasas de leliq de forma abrupta) y empresas reguladas (se descuenta que pisará tarifas por un tiempo). Con una o dos de esas medidas a los gorilas les agarra un ataque al corazón, y en general esa es la ideología de los tipos que mueven mucha plata en nuestro mercado. Y bueno, los que no tengamos ese sesgo ideológico podremos comprar un pedacito de nuestro país a precios podrían llegar a ser de remate tipo 2012, y esta vez sí podremos hablar de oportunidades que no se dan sino cada 10 años. Pero no sé si en dos semanas tendríamos ya esos precios, más bien para Diciembre, Enero... Ahora... yo no lo veo a FF ganando por 10% ni a palos, con esta calma cambiaria, esta desaceleración de la inflación, las paritarias entrando en cutas todos los meses, las 18 cuotas para comprar motos y electrodomésticos, etc, etc. La gente tiene memoria de muy corto plazo. Además no recuerdo haber visto una campaña donde el balance de fuerzas mediáticas y económicas haya sido tan desigual, y una de las fuerzas (el oficialismo) esté tan cohesionada y coacheada, y del otro lado haya un armado hecho tan a las apuradas.