Se trata de una prioridad para el Gobierno el cierre de las negociaciones que lleva adelante con los fondos buitre en Nueva York para que la Argentina salga del default.
Confiado en que los gobernadores apoyarán estas leyes porque les permitirá, a ellos también, buscar financiamiento externo, el oficialismo espera cosechar el voto de los legisladores peronistas no kirchneristas.
Éstos se agrupan en tres bloques distintos: el interbloque Unidos por una Nueva Argentina (UNA), que lidera Sergio Massa, con 36 miembros; el Bloque Justicialista, recientemente escindido del Frente para la Victoria, que cuenta con 17 integrantes, y la bancada Juntos por Argentina, de Darío Giustozzi, con otros siete miembros.


