El ministro de Planificación, Julio De Vido, aseguró hoy que China no representa una "amenaza" para el país sino una "oportunidad" para desarrollar la industria, al salir al cruce del presidente de la empresa Ternium, del Grupo Techint, quien había cuestionado la asociación comercial.
"La asociación con China, que va a permitir la financiación de obras de infraestructura por 12.000 millones de dólares, no es una amenaza para la industria nacional; todo lo contrario: es una inmejorable oportunidad", dijo el funcionario en un comunicado.
Según el funcionario kirchnerista, en promedio el 76 por ciento de lo que se impulsará con el financiamiento estará integrado por componentes nacionales, en particular los insumos vinculados a la metalurgia.
De esta manera, el ministro se mostró en desacuerdo con las declaraciones del presidente de Ternium (perteneciente al Grupo Techint), Daniel Novegil, quien disertó en la 35ª Convención del Instituto Argentino de Ejecutivos de Finanzas (IAEF), en Mendoza.
Novegil había afirmado que "China es una amenaza para la Argentina a partir del ingreso desmedido de productos de ese país".
"Si habla desde San Nicolás (sede del principal complejo industrial del Grupo Techint) como industria nacional, no tiene de qué preocuparse porque este Gobierno promueve y promoverá siempre la defensa de la producción nacional y la sustitución de importaciones, como muestra la duplicación del PBI industrial desde 2003", señaló De Vido.
Y agregó: "Pero si lo hace desde Luxemburgo (donde tiene domicilio fiscal el holding) y pretende vendernos a los argentinos sus productos a valores internacionales en dólares mientras tiene energía subsidiada y costos en pesos, desde ya que no estamos de acuerdo".
En línea con ello, el ministro sostuvo además que "los 9.000.000 de metros cúbicos diarios de gas y los 6.000.000 de megavatios anuales que requiere el sector siderúrgico en la Argentina, en cualquier otra parte del mundo tendría un sobrecosto anual superior a 2.000 millones de dólares".
