A fines del año pasado derrochaban optimismo por los cupones. El 9% de crecimiento en 2011 garantizaban por efecto arrastre un buen crecimiento en 2012 y disparaban el pago en 2013. Además, M del Pont afirmaba que se crecería al 6% en 2012.
Hoy parece que no es tan así y las causas son varias. Primero Felletti avisó que el segundo semestre iba a ser difícil por la posible recesión en Europa. Por acá decían que nuestros principales compradores son Brasil y China por lo que si esos países (más algunos otros) siguen creciendo estaremos bien. Incluso la soja ayuda con sus 500 u$ la tonelada.
Pero en los últimos meses las restricciones de Moreno ya se hacen sentir y diría que nadie se anima a decir cómo será el comportamiento del PBI durante 2012.
El tema de cerrar o no la economía merece un análisis profundo y más en el caso de los inversores de cupones atados al PBI.
Los neoliberales pregonan la apertura irrestricta de la economía porque sostienen que de ese modo la industria local se verá obligada a ser competitiva globalmente. Las empresas que resistan sobrevivirán, el resto va a la quiebra.
Los proteccionistas dicen que hay que cerrar las importaciones para proteger las empresas y el empleo locales.
Ambas posturas las hemos visto en décadas pasadas y no han funcionado. La primera porque es suicida, la segunda porque es inútil.
¿Cómo se sale de este dilema? No es fácil, pero algunos países como Corea del Sur, Finlandia, etc. lograron economías de escala y competitivas internacionalmente. Los extremos ya vimos que no sirven. Es necesario un plan de desarrollo industrial que estimule la innovación, el agregado de valor, las mejoras tecnológicas, el incremento del empleo calificado, etc., etc. CFK lo pregona y lo sabe. Hoy Debora Giorgi tiene un plan de esas características. Pero Moreno es el verdadero Ministro de Economía y decide que las importaciones deben restringirse aunque no haya capacidad nacional para producir los insumos que la industria necesita.
La necesidad de cuidar los dólares puede ser real. Por ejemplo, para importar gas. El caso es que se podrían hacer fuertes ahorros reconvirtiendo el transporte de mercaderías por camiones y pasarlo al ferrocarril, que es mucho más barato.
El hecho es que la economía se desacelera. Por ejemplo, leer esto:
http://www.ieco.clarin.com/economia/des ... 33057.html
Y lo dicen los propios datos del INDEC.
La pregunta del millón es ¿Por qué no se toman medidas de ahorro de dólares que no perjudiquen el crecimiento, una de las banderas más preciadas del kirchnerismo?