Ya que te comes todas las noticias que te dan como si fueran verdad comete esta:
El ministro del Interior, Florencio Randazzo, salió ayer a responder las versiones de algunos medios sobre su presunta participación como informante en las denuncias contra el vicepresidente Amado Boudou y responsabilizó a la empresa Boldt de lo que consideró una “operación contra el gobierno” por los “privilegios” que perdió. El ministro sostuvo que “la matriz del conflicto” por el caso Ciccone es que “se toman decisiones en función de las mayorías”.
“Lo que está claro es que una de las empresas que está involucrada en esta operación contra el gobierno es Boldt. No hay dudas porque esta firma tenía enormes privilegios con el Estado Nacional y se los quitó este gobierno”, aseveró el titular de la cartera política en declaraciones a radio Continental.
Randazzo reveló que “Boldt era la principal empresa subcontratista de Siemens”, cuyo contrato para la confección de los documentos fue rescindido por la administración kirchnerista, que decidió que el Estado se haría cargo de la confección de los documentos en soporte tarjeta.
Incluso, consignó que cuando el gobierno nacional “forzó que Siemens renunciara al reclamo que tenía en el CIADI contra la Argentina, se intentó poner la condición de que el Estado Nacional se hiciera cargo de pagarle a las empresas subcontratistas de Siemens”, algo a lo que el gobierno se opuso “terminantemente”.
“Nos opusimos terminantemente porque nuestras pruebas acreditaban que el contrato que tenía Siemens había sido un fraude contra el Estado argentino, es decir que nuestra decisión afectó en forma directa a Boldt y a otros subcontratistas”, consignó Randazzo. De hecho, afirmó que el Estado rechazó “terminantemente cualquier solicitud de estas empresas precisamente porque se había contemplado en la cláusula cuarta del acuerdo firmado con Siemens el 12 de agosto de 2009”, en el que quedó expresamente asentado que no debería responder por los reclamos de las subcontratistas.
Por otro lado, Randazzo consignó que la empresa Boldt también “se vio afectada” por la decisión del gobierno nacional de crear el DNI soporte tarjeta, que desactivó automáticamente la confección de las cédulas de identidad, a su cargo merced al contrato que mantenía con la Policía Federal. “¿Qué fue lo que ocurrió con esta decisión? Rápidamente se terminó cayendo el contrato que tenía la empresa Boldt con la Policía Federal para la confección de la cédula federal y nosotros, con el documento soporte tarjeta, remplazamos definitivamente la cédula”, explicó Randazzo.
Detalló que a esto se sumó luego la decisión del gobierno nacional de que, a partir de 2011, la confección de los padrones electorales se llevara adelante “a través de una empresa del Estado”, en referencia a la Casa de Moneda, con lo cual también resultó perjudicada Boldt, “que había llevado esa tarea adelante por licitaciones en 2005, 2007 y 2009”.
“Acá la matriz del conflicto que atraviesa la gestión de Cristina y que empezó con Néstor Kirchner es que las decisiones se toman en función de las mayorías, y esto que parece tan obvio no fue obvio durante muchos años”, aseveró.
En ese sentido, fue categórico al señalar que “en el gobierno no hay ninguna interna” y aseverar que “lo que hay acá son intereses económicos en juego que tienen una onda expansiva realmente enorme porque están vinculados a empresas que estaban acostumbradas a manejar el país, entre ellas los multimedios.”
“La matriz del conflicto que tiene este gobierno es tomar decisiones que afectan intereses que habían gobernado la Argentina sin ningún voto y sin ningún rostro visible en los últimos 30 años de democracia”, sentenció el titular de la cartera política.