Mensajepor DarGomJUNIN » Lun May 28, 2012 5:41 pm
-Riesgo país: Un resumen, para poder entender un aparente galimatías financiero. Para calcular el EMBI+ J. P. Morgan analiza cada día el rendimiento de los instrumentos de la deuda de un país, basado en bonos emitidos en dólares con legislación New York (en nuestro caso: PARY y DICY, ¿más el Nuevo Global 2017?) y la tasa de interés que se abona por ellos, según cotización en los mercados. Pero, además se evalúan otros aspectos significativos como las turbulencias políticas, el nivel de déficit fiscal, el crecimiento de la economía y la relación ingresos-deuda.
-Utilizan para calificar, una variada mezcla de factores políticos, sociales y económicos, determinados a su entero arbitrio. En resumen, los bonos sólo son un componente parcial de ese indicador final, que en realidad es establecido en una forma muy discrecional y unilateral. Con este extraño mix de valoración, el sistema tiene una alta subjetividad y una escasa equidad intrínseca.
-Es casi imposible obtenerlo matemáticamente, pues contiene el ingrediente político que le agregan sus formadores. Es un parámetro poco transparente y demasiado discrecional, que no refleja el riesgo implícito en bonos y consiste en una pseudo cuantificación inconsistente de presuntas contingencias de default soberano. Es ingenuo pensar que EMBI es sólo una diferencia de puntos de TIR entre cada cartera de bonos locales y un bono del Tesoro USA, aunque en teoría debería ser así, y es la forma en que está expresado en cualquier texto disponible.
-En realidad, J.P.Morgan trabaja en función de sus propios intereses y los de sus poderosos clientes internacionales. “El riesgo país, pretende ser un reflejo de las condiciones económicas, sociales, políticas e incluso geográficas.”(sic). Como derivación de este peculiar método de cálculo, el riesgo-país oscila con un “efecto apalancado” por otras variables casi desconocidas. Sólo puede servir como un indicador útil, pero exagerado y manipulado.
-Por consiguiente, no es un índice imparcial, sino un invento artificial de la entidad creadora. Corresponde destacar que una parte importante de esa valoración, representa su “percepción” arbitraria de cada riesgo. La manipulación del EMBI+ (confeccionado con una lógica aparente), tiene una incidencia directa en el verdadero corazón del negocio sobre el riesgo: la venta de CDS (Credit Default Swaps) con un alto spread. Cabe aclarar que los CDS no tienen un mercado público, regulado y transparente. En consecuencia no constituyen un verdadero punto de referencia y no son útiles para evaluar nada.
-Un informe de “The New York Times” (12/12/10) revela por primera vez un gran secreto de la trama financiera, que existe detrás del negocio cartelizado de las primas provenientes de estos derivados. Los grandes bancos (especialmente J.P.Morgan Chase, Goldman Sachs y Morgan Stanley) que dominan ese opaco mercado, mantienen reuniones secretas mensuales para coordinar su accionar en el rubro. Los banqueros que los representan, comparten un objetivo esencial: proteger los intereses dominantes de esos bancos. Constituye sin dudas, uno de los ámbitos financieros más lucrativos y controvertidos.
-Es una trampa finamente armada, si un país entra en la vorágine de tomar y repagar créditos externos, cada vez pagará más caro hasta llegar a tasas usurarias, porque quienes manejan los préstamos a su vez digitan el riesgo país.
Con el agravante que gran parte de su recaudación fiscal será destinada a ese repago, no permitiendo crecer.
La única forma de librarse de este dudoso y nefasto índice, es que el Estado no recurra al mercado de capitales.
-JPMorgan, la institución que mejor resistió la crisis financiera global, reveló (11/5/2012) una pérdida de 2.000 millones de dólares “por una mala inversión” (sic). La alarmante pérdida fue dada a conocer por Jamie Dimon CEO de JPMorgan, el banco de inversión más grande de Estados Unidos y el que gozaba de mayor prestigio. Dimon dijo que la inversión, una compleja operación financiera, “estuvo mal diseñada, mal ejecutada y mal monitoreada” agregando que “hubo errores, descuidos y mal juicio” (sic). Agregó Dimon que “sólo porque nosotros seamos estúpidos, eso no significa que todos los demás lo sean” en un intento de blindar al resto del sistema financiero del fiasco de su compañía.
-15/5/2012: El FBI abrió una investigación sobre las pérdidas por operaciones de mercado de J.P.Morgan, lo que aumentó la presión sobre el banco, después de que la Comisión de Valores de Estados Unidos y la Reserva Federal dijeron que estaban analizando los negocios que originaron el escándalo. En Washington, el secretario del Tesoro estadounidense, Timothy Geithner, dijo que las pérdidas de JPMorgan dejaban ver la necesidad de que hubiera una reforma, con mayores controles de la actividad financiera. "Creo que esta falla en el manejo de riesgo es sólo una confirmación muy sólida para una fuerte reforma financiera", expresó textual Geithner, durante un evento público.
-El verdadero motivo por el que J.P.Morgan se dedicaba a influir en cada “riesgo país” son sus propios negocios, manipulando esos valores lograban manejar la cotización de los CDS, pero algunos cálculos sobre Europa fallaron.
A inicios de abril 2012, Bloomberg News y el Wall Street Journal publicaron artículos citando a fuentes en los mercados de derivados que decían que la Oficina Principal de Inversión de JP Morgan había hecho grandes apuestas que habían distorsionado los precios. Jamie Dimon, el CEO de JPMorgan, dijo que "la estrategia que tuvimos fue mal examinada" y agregó que "se controló mal y nunca debió haber ocurrido". Dimon reconoció que la debacle le entrega argumentos a los defensores que piden una regulación más estricta de los bancos, diciendo: "este es un momento muy desafortunado e inoportuno para que haya sucedido este tipo de error". "Nos duele a nosotros mismos y a nuestra credibilidad”, agregando “tenemos que esperar y pagar totalmente el precio por estas pérdidas enormes”.
-Días después de haber revelado esa pérdida monumental en sus transacciones con derivados, J.P.Morgan Chase fue notificada de 3 demandas de accionistas que acusan a los ejecutivos de la compañía de “engañar a los inversionistas sobre el alcance del error”, presentando la revelación de que las pérdidas son 50 % mayores y en gran incremento.
Los CDS (Credit Default Swaps) se conciertan por un determinado período y no cubren el riesgo de default de un emisor, sino solamente el no pago de un activo especificado. Se ignora su volumen y su precio siempre es excesivo.
Los precios de los CDS son presentados como termómetros de lo que sucede en el mercado, pero en realidad tienen una fijación de valor totalmente arbitraria y muy poco transparente, en cuanto a la manipulación del miedo inversor.
Fuente: artículo periodístico de elaboración propia y basado en fuentes de información internacionales confiables.