El "Negocio" de la Inflación
La discusión acerca del mínimo no imponible (que tiene que ser ajustado) y el impuesto a las ganancias de los trabajadores en relación de dependencia (que tiene que existir), me hizo reflexionar acerca de la inflación alta pero no híper que venimos soportando desde hace unos años.
En otra entrada escribiré sobre problemas en la esfera contractual, pero ahora me quiero referir al "negocio" que hace el Estado con una inflación como la que tenemos.
Los argentinos, ya genéticamente condicionados para vivir con inflación, nos acomodamos como podemos a las amplias distorsiones en la economía que produce la inflación, y el Estado -en tanto no se llegue a una híper inmanejable por su costo social- hace su negocio.
Particularmente licuando sus pasivos (recuerden los más jóvenes "malcriados" por la inflación 0 de la década maldita: siempre es bueno ser deudor en épocas de inflación -en realidad, en Argentina siempre es bueno ser deudor, pero ese es otro tema que en algunas variantes traté acá, acá y acá-), y generándose ingresos que de otro modo no tendría, por ejemplo:
Impuesto a las ganancias por la ausencia de ajuste por inflación, que hace que en no pocos casos el costo histórico de un activo se acerque a 0, y se pague la tasa del impuesto no por la ganancia sino por la disposición del capital).
Impuesto a los bienes personales de "clase media" convertida por la inflación en sujetos del impuesto.
Impuesto a las ganancias de los ingresos del trabajo (en sentido amplio), sea por el congelamiento del mínimo no imponible, sea por -lo que es aún peor- mantener las "escalas" sin un mínimo ajuste.
Es cierto que los ingresos también se afectan por la inflación: la moneda se envilece para todos. Pero aún así, el Estado es el más ganador (o menos perdedor si se lo prefiere), en tanto la inflación sea alta pero "controlada". Es jugar con fuego, y ciertamente no es nada progre ya que la inflación es un impuesto regresivo por definición.
http://abogadoscorporate.blogspot.com.a ... acion.html