Re: Actualidad y política
Publicado: Mar Feb 05, 2013 8:53 am
El Gobierno “inventó” el escrache
POR JULIO BÁRBARO
05/02/13
Se viven cosas que no le gustan a nadie, de las cuales no tenemos derecho a sorprendernos, son como la “crónica de una muerte anunciada”. Suele ser lógico que los humanos nos equivoquemos, lo absurdo resulta no prever ni aceptar las consecuencias. El actual gobierno descubrió hace tiempo que podía utilizar los medios de comunicación a su alcance para devaluar a las figuras de todos aquellos que no coincidíamos con sus propuestas. Cuando surgió el discutido producto de “6,7,8”, muchos nos sentimos asombrados. Cuando los medios oficiales agresivos se multiplicaron y supuestos periodistas bien rentados se dedicaron a agredir opositores la cosa fue pasando a mayores. Con la discutible ley de medios los que opinamos con libertad fuimos catalogados de empleados de las corporaciones quedando para los oficialistas rentados el lugar de militantes de la justicia. Una situación casi absurda, los medios oficiales nos denostaban y si salíamos en los privados nos convertíamos en traidores. Una clara decisión de imponernos el silencio.
Soy uno de los tantos que vive en esta dura antinomia, exiliado de la obsecuencia oficialista y confinado a la traición de los medios libres, varios de los cuales fueron ya adquiridos por oficialistas enriquecidos. Y cada tanto todavía intentan que escuchemos un discurso sobre la amplitud y las bondades de esa democracia que nos gobierna.
El gobierno inventó el escrache en los medios oficiales y se dedicó a degradar a los que no obedecemos sus designios. Demasiados esbirros nos pegaron duro y bajo, desataron vientos sin asumir que están sembrando tempestades.
En “La batalla de Argel”, de Gillo Pontecorvo, los periodistas increpan al jefe del FLN sobre por qué utiliza bombas en lugares públicos. La respuesta que recuerdo era algo parecido a “si tuviera aviones como ustedes, las tiraría desde arriba”. Está mal que se escrache a los funcionarios en los lugares públicos, pero no es más grave que atacar opositores desde los medios públicos. Uno tiene la estatura de su enemigo, nos degradamos al degradarlo. Sería bueno que el gobierno utilice con altura y pluralismo los medios públicos, luego entonces estaremos todos con derecho a exigir el respeto que nos merecemos. Como decía el General, “el pescado se empieza siempre a pudrir por la cabeza”.
http://www.clarin.com/politica/Gobierno ... 14001.html
POR JULIO BÁRBARO
05/02/13
Se viven cosas que no le gustan a nadie, de las cuales no tenemos derecho a sorprendernos, son como la “crónica de una muerte anunciada”. Suele ser lógico que los humanos nos equivoquemos, lo absurdo resulta no prever ni aceptar las consecuencias. El actual gobierno descubrió hace tiempo que podía utilizar los medios de comunicación a su alcance para devaluar a las figuras de todos aquellos que no coincidíamos con sus propuestas. Cuando surgió el discutido producto de “6,7,8”, muchos nos sentimos asombrados. Cuando los medios oficiales agresivos se multiplicaron y supuestos periodistas bien rentados se dedicaron a agredir opositores la cosa fue pasando a mayores. Con la discutible ley de medios los que opinamos con libertad fuimos catalogados de empleados de las corporaciones quedando para los oficialistas rentados el lugar de militantes de la justicia. Una situación casi absurda, los medios oficiales nos denostaban y si salíamos en los privados nos convertíamos en traidores. Una clara decisión de imponernos el silencio.
Soy uno de los tantos que vive en esta dura antinomia, exiliado de la obsecuencia oficialista y confinado a la traición de los medios libres, varios de los cuales fueron ya adquiridos por oficialistas enriquecidos. Y cada tanto todavía intentan que escuchemos un discurso sobre la amplitud y las bondades de esa democracia que nos gobierna.
El gobierno inventó el escrache en los medios oficiales y se dedicó a degradar a los que no obedecemos sus designios. Demasiados esbirros nos pegaron duro y bajo, desataron vientos sin asumir que están sembrando tempestades.
En “La batalla de Argel”, de Gillo Pontecorvo, los periodistas increpan al jefe del FLN sobre por qué utiliza bombas en lugares públicos. La respuesta que recuerdo era algo parecido a “si tuviera aviones como ustedes, las tiraría desde arriba”. Está mal que se escrache a los funcionarios en los lugares públicos, pero no es más grave que atacar opositores desde los medios públicos. Uno tiene la estatura de su enemigo, nos degradamos al degradarlo. Sería bueno que el gobierno utilice con altura y pluralismo los medios públicos, luego entonces estaremos todos con derecho a exigir el respeto que nos merecemos. Como decía el General, “el pescado se empieza siempre a pudrir por la cabeza”.
http://www.clarin.com/politica/Gobierno ... 14001.html
