Mensajepor quique43 » Lun Sep 29, 2014 7:40 pm
Si hubieramos cumplido no hubieramos ahorrado una montaña de dòlares, pero prefieren pelearse con el mundo, y engañar a la gilada, que les compra el relato:
Para no ser menos, el Gobierno de Dilma Rousseff también hizo su roll over en julio. Avanzó en una operación por u$s3.500 millones, de los cuales u$s2.000 millones se destinaron al canje de antiguas emisiones.
Los títulos emitidos se extendieron hasta el 2045, y la tasa ofrecida por el país vecino fue de un 5,13%. Como si esto no hubiese sido suficiente, ahora está por colocar u$s1.000 millones a través de un título con vencimiento en el año 2025 a la bajísima tasa del 3,9%.
Paraguay tampoco quiso perderse la fiesta. A principios de agosto colocó u$s1.000 millones en bonos a 30 años con un rendimiento de 6,1%.
Esta operación marcó su regreso a los mercados internacionales desde el aumento de su calificación de riesgo otorgado en junio.
Los funcionarios celebraron ese avance, remarcando que Paraguay había logrado pagar menos de la mitad de tasa que la que le habían pedido los inversores a la provincia de Buenos Aires.
Por cierto, se trató de su segunda salida en menos de dos años, ya que en enero del 2013 debutó en los mercados con un bono de u$s500 millones a 10 años, con un interés ofrecido del 4,62%.
Si en el comparativo el análisis se extiende más allá de la región, vale la pena mencionar lo acontecido en España.
Recientemente -y pese a que su economía "no la tiene tan fácil"- colocó 3.500 millones de euros a la tasa más baja de su historia: 2,99% a diez años de plazo.
Las tasas "hablan"
Volviendo nuevamente al caso argentino, las posibilidades de retornar al sistema financiero internacional resultan por ahora lejanas, tras el conflicto con los holdout y la nota de default otorgada por las calificadoras.
El agravamiento del problema de deuda comenzó a reflejarse en la mayor tasa que deben ofrecer los bonos locales que, dicho sea de paso, se alejan cada vez más de sus pares de la región.
El mejor ejemplo es el bono Global, por ser un título que responde a condiciones similares en los diferentes países.
¿Cuánto debe ofrecer para captar a inversores? Casi un 17%. Es decir, unas once veces más que el similar brasileño a igual período.
En cuanto a otros títulos, aún cuando sus plazos de colocación son diferentes, los resultados son también más que elocuentes. Aquellos con vencimiento en 2016, como los colombianos o peruanos, ofrecen apenas un 1%.
Curiosamente, incluso el título venezolano que vence en 2018, paga cuatro puntos menos que el similar albiceleste, pese a los serios desequilibrios de la economía del país presidido por Nicolás Maduro.
A modo de simple referencia, si se compara el Boden 2015 con el Global de Ecuador (que vence en el mismo año) la relación entre ambos es de tres a uno: el papel nacional debe pagar más del 15%, el otro apenas un