Re: Actualidad y política
Publicado: Mar Mar 24, 2015 2:04 pm
Los populistas mentirosos e inùtiles, vienen destrozando la escuela pùblica, se llenan la boca con el 6% del gasto en educaciòn del PBI, pero el resultado es que cada vez asisten menos cantidad de alumnos a la escuela pùblica, la conclusiòn es que el kichnerismo està privatizando la educaciòn, todo lo contrario del verso para la gilada. Son muy brutos, y malintencionados.
La declinación de la matricula estatal primaria en el período 2003-2011 alcanza al 7,9 por ciento del total. En igual período, fue aún mayor la reducción en la cantidad de alumnos que ingresan al primer grado en escuelas estatales. En el 2011 se matricularon en primer grado en escuelas estatales 90 mil alumnos menos que en el 2002; esta considerable reducción del 13 por ciento es un hecho inédito en nuestra historia.
Pero la realidad era otra ya que, según los Anuarios Estadísticos del Ministerio de Educación, las escuelas primarias estatales en 2010 registraban 25 mil alumnos menos que en 2009, mientras las escuelas privadas registraban 19 mil alumnos más. En 2010, ingresaron a primer grado estatal en todo el país 7.262 alumnos menos que en 2009, mientras que en las escuelas privadas ingresaban 2.561 alumnos más. La matrícula inicial y la secundaria sí habían crecido, pero apenas 1,7 por ciento.
Fue positivo que el gasto en educación haya superado el 6 por ciento del PBI, meta fijada por la Ley de Financiamiento Educativo (año 2005). Pero esta no era la única meta legal.
Con una matrícula primaria estatal de 3,5 millones de alumnos, deberían gozar de los beneficios de la jornada extendida más de un millón de niños, pero la realidad es otra. En el 2011 eran apenas 293 mil los alumnos que asistían a estas escuelas. Cumplir la ley exigiría multiplicar más de tres veces la actual cobertura.
Unesco indica la necesidad de un mínimo de 830 a 1.000 horas de clase anuales, pero nuestras escuelas están lejos de esta meta; el promedio en los países industrializados se ubica en 187 días y 803 horas anuales. Son muchas las naciones que se toman en serio la inclusión escolar de los niños, comenzando por el calendario de clases: 205 días en Costa Rica, 200 en México, Brasil, Perú, Ecuador y Bolivia, luego Chile con 190 y Uruguay con 185. En Cuba, el calendario escolar determina 200 días de clase con 5 horas diarias, o sea 1000 horas anuales.
Nuestro calendario es pobre: 190 días que, además, no se cumplen, con apenas 4 horas diarias de clase (760 horas anuales).
Los discursos siempre enuncian la necesidad de mejorar la educación, pero la verdad es que no hay tiempo para perder, porque nuestra sociedad ya fue informada acerca del retroceso por los resultados de la Prueba Pisa (2009).
En el año 2011 asistían a escuelas estatales primarias casi 300 mil niños menos que en el 2002. Está avanzando año a año desde 2003 una acelerada “privatización ”, en una evolución opuesta a la registrada en el periodo 1996-2002, cuando de cada 100 nuevos inscriptos en la escuela primaria 85 optaban por una estatal.
La declinación de la matricula estatal primaria en el período 2003-2011 alcanza al 7,9 por ciento del total. En igual período, fue aún mayor la reducción en la cantidad de alumnos que ingresan al primer grado en escuelas estatales. En el 2011 se matricularon en primer grado en escuelas estatales 90 mil alumnos menos que en el 2002; esta considerable reducción del 13 por ciento es un hecho inédito en nuestra historia.
Pero la realidad era otra ya que, según los Anuarios Estadísticos del Ministerio de Educación, las escuelas primarias estatales en 2010 registraban 25 mil alumnos menos que en 2009, mientras las escuelas privadas registraban 19 mil alumnos más. En 2010, ingresaron a primer grado estatal en todo el país 7.262 alumnos menos que en 2009, mientras que en las escuelas privadas ingresaban 2.561 alumnos más. La matrícula inicial y la secundaria sí habían crecido, pero apenas 1,7 por ciento.
Fue positivo que el gasto en educación haya superado el 6 por ciento del PBI, meta fijada por la Ley de Financiamiento Educativo (año 2005). Pero esta no era la única meta legal.
Con una matrícula primaria estatal de 3,5 millones de alumnos, deberían gozar de los beneficios de la jornada extendida más de un millón de niños, pero la realidad es otra. En el 2011 eran apenas 293 mil los alumnos que asistían a estas escuelas. Cumplir la ley exigiría multiplicar más de tres veces la actual cobertura.
Unesco indica la necesidad de un mínimo de 830 a 1.000 horas de clase anuales, pero nuestras escuelas están lejos de esta meta; el promedio en los países industrializados se ubica en 187 días y 803 horas anuales. Son muchas las naciones que se toman en serio la inclusión escolar de los niños, comenzando por el calendario de clases: 205 días en Costa Rica, 200 en México, Brasil, Perú, Ecuador y Bolivia, luego Chile con 190 y Uruguay con 185. En Cuba, el calendario escolar determina 200 días de clase con 5 horas diarias, o sea 1000 horas anuales.
Nuestro calendario es pobre: 190 días que, además, no se cumplen, con apenas 4 horas diarias de clase (760 horas anuales).
Los discursos siempre enuncian la necesidad de mejorar la educación, pero la verdad es que no hay tiempo para perder, porque nuestra sociedad ya fue informada acerca del retroceso por los resultados de la Prueba Pisa (2009).
En el año 2011 asistían a escuelas estatales primarias casi 300 mil niños menos que en el 2002. Está avanzando año a año desde 2003 una acelerada “privatización ”, en una evolución opuesta a la registrada en el periodo 1996-2002, cuando de cada 100 nuevos inscriptos en la escuela primaria 85 optaban por una estatal.