Su éxito en América Latina le sirve de trampolín a Medina-Mora en CitigroupPor David Enrich
Noticias de Wall Street Journal: anterior | siguiente Miércoles 3 de febrero de 2010 | Publicado en edición impresa Comentar Sé el primero en comentar
ImprimirEnviar por e-mailCambiar tamañoPublicarVotar (0)Ya votaste (0)Compartir Menéame Digg Del.icio.us Facebook Twitter My Space Sonico Linkedin Link permanente
Manuel Medina-Mora ha aspirado desde hace tiempo a dirigir Citigroup Inc. Ahora, está más cerca de lograrlo.
Después de más de un década a la cabeza de Grupo Financiero Banamex, la entidad mexicana que es uno de los principales negocios de Citigroup, Medina-Mora renunció la semana pasada para dedicar más tiempo a una tarea abrumadora. El ejecutivo mexicano de 59 años tiene que revitalizar las operaciones de banca minorista de Citigroup a nivel mundial.
Desde que se anunció su ascenso el mes pasado, empezaron a circular rumores en Citigroup de que Medina-Mora es el principal candidato para sustituir a Vikram Pandit como presidente ejecutivo. Pandit, en todo caso, sólo ha estado 25 meses al frente del conglomerado neoyorquino y no tiene planes de dejar el puesto, según fuentes familiarizadas con la situación.
Medina-Mora declinó comentar al respecto. Sin embargo, no cabe duda de que es un hombre en pleno ascenso en un gigante que necesita gestores capaces para poner fin a una desalentadora racha de pérdidas y restaurar la credibilidad de Citigroup entre los inversionistas y los reguladores.
A diferencia de Pandit, que aceptó una remuneración total de un dólar hasta que el banco vuelva a la rentabilidad, Medina-Mora embolsó unos US$9 millones en 2009, convirtiéndose en el segundo empleado mejor pagado de Citigroup. Medina-Mora también ganó la batalla que mantuvo con el equipo de Pandit sobre la suerte de dos subsidiarias de Banamex que el año pasado tenían el cartel de "en venta" pero que Citigroup retiró del mercado en enero tras las objeciones del banquero mexicano.
El creciente poder de Medina-Mora refleja su liderazgo en unas operaciones que lograron mantenerse alejadas de los titulares mientras la mayor parte de Citigroup sufría los embates de la crisis financiera. Banamex y otras operaciones de Citigroup en América Latina a cargo de Medina-Mora obtuvieron ingresos netos del orden de los US$12.100 millones el año pasado, alrededor del 20% de la facturación total de los negocios principales de Citigroup.
Michael Mayo, director ejecutivo y analista bancario de Calyon Securities, afirma que Medina-Mora "ha liderado un área de Citigroup que no ha tenido problemas significativos". Banamex es una de las divisiones favoritas de Pandit, quien ha alabado su modelo de "banco universal" que enfatiza la cooperación entre las diferentes partes del banco como el futuro de Citigroup. "Vamos a exportarlo a todo el mundo", proclamó Pandit en 2008. El máximo responsable de Citigroup ha despachado a ejecutivos a México para familiarizarse con la exitosa fórmula de Medina-Mora.
Aún así, Medina-Mora es el ejecutivo más poderoso de Citigroup que no forma parte del estrecho círculo de cercanos a Pandit. El banquero mexicano se quejó el año pasado a algunos colegas del liderazgo de Pandit, según fuentes cercanas. Por su parte, algunos ejecutivos de Citigroup se quejan de que Medina-Mora no es un jugador de equipo y lamentan que delegue en sus subordinados la tarea de devolver las llamadas, en lugar de hacerlo personalmente. Un portavoz de Citigroup dijo que Pandit, que está de viaje por Asia esta semana, no estaba disponible para hacer comentarios.
La experiencia de Medina-Mora se reduce geográficamente a América Latina. En Citigroup, no obstante, hay muy pocos ejecutivos con la capacidad de supervisar las operaciones minoristas en decenas de países, debido en parte a una serie de deserciones. Ajay Banga, quien estaba a cargo del negocio internacional de banca minorista de Citigroup, se pasó a MasterCard Inc. el año pasado. Algunos reguladores han manifestado su inquietud sobre la escasa experiencia en la banca minorista de los altos ejecutivos de Citigroup, según fuentes cercanas.
La carrera de Medina-Mora comenzó en 1971 cuando tenía 21 años. Hijo de un cirujano, Medina-Mora representó la tercera generación de su familia en trabajar en Banamex, después de su abuelo y de su tío. Tras un ascenso paulatino, asumió la presidencia ejecutiva en 1996.
Banamex duplicó su red de sucursales en México y creó divisiones de gestión de activos que operaban desde sus sucursales. En 2001, Medina-Mora acordó vender Banamex a Citigroup por US$12.500 millones. Desde entonces, ha dirigido las operaciones de Citigroup en América Latina, donde realizó adquisiciones y propició un crecimiento interno que expandió en más de 50% la red de sucursales de Citigroup en la región, mientras que sus balances de préstamos y depósitos se dispararon 75%.
Medina-Mora ha cultivado cuidadosamente su imagen. Hace varios años, contrató a un asesor para que lo ayudara a mejorar su apariencia, se deshizo de los anteojos y comenzó a hacer ejercicio con un personal trainer, cuentan colegas.
También se dedicó a convertirse en un mejor orador. Practica con esmero sus discursos y las llamadas telefónicas importantes. "Es todo un espectáculo", dijo un socio de larga data, "y detrás hay un equipo completo que monta el espectáculo. Se prepara para todo".
Medina-Mora ha comentado a varios colegas que le gustaría ser el presidente ejecutivo de Citigroup. Mantuvo una estrecha relación con Charles Prince, el predecesor de Pandit, pero cualquier esperanza de sucederlo se esfumó cuando Prince se vio obligado a dimitir en 2007 y Pandit fue elegido para reemplazarlo.
Su tarea no será fácil. El negocio de banca minorista en Norteamérica de Citigroup es mucho más pequeño que el de rivales como Bank of America Corp. y J.P. Morgan Chase & Co. Analistas y ejecutivos afirman que ha sido víctima de una larga serie de inversiones de dudosos resultados y de una estrategia difusa que relegó a Citigroup a un papel secundario en mercados clave.
Terri Dial, el antecesor de Medina-Mora, tuvo dificultades para diseñar un plan para enderezar el rumbo y perdió la confianza de Pandit, según fuentes cercanas. Cuando le ofrecieron el cargo, Medina-Mora insistió en que se le permitiera gestionar el negocio sin interferencias de otros ejecutivos, dice una fuente cercana.
Este es el motivo de la suba y espectativas , cambios
