La presidente brasileña aseguró que "nunca aceptaremos ciertos criterios que el organismo ha impuesto a otros países. Ya conocemos esa película, ya sabemos lo que es la supervisión del FMI". El expresidente brasileño, Lula da Silva, también arremetió contra el Fondo al afirmar que "el FMI decía que tenía una solución para todo, cuando la crisis estaba en Bolivia, Brasil o México. Cuando golpea a países ricos se calla, entró en un profundo silencio. Y el BID no habla más de nada".
La presidenta brasileña Dilma Rousseff cuestionó la posición de los países desarrollados frente a la crisis global, y al Fondo Monetario Internacional (FMI) por haber alentado políticas que desaceleran las inversiones e impulsan el ajuste.
Criticó al FMI al recordar "las oportunidades que perdimos durante las dos décadas que estuvimos bajo la injerencia del organismo sobre nuestras políticas de inversiones". "Ya conocemos esa película, ya sabemos lo que es la supervisión del FMI", concluyó la mandataria brasileña.
Por otra parte, Rousseff reiteró que Brasil, cuyo PBI crecerá 3,5 por ciento este año, continúa apostando a las inversiones para evitar que la economía se enfríe y asi lograr que se mantenga la actividad. "Nosotros tenemos que continuar firmes con un ojo mirando la inflación y con el otro mirando el crecimiento", señaló la mandataria.
La presidenta de Brasil ya había hablado la semana pasada en la Unión Europea, sobre el riesgo de implementar el sistema del ajuste como una solución frente a la crisis financiera internacional. "Parece que no hay empeño, una convicción política uniforme" en los países ricos sobre "cómo lidiar con esta crisis", señaló Rousseff.
El ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva también criticó durante su estadía en Estados Unidos, el papel del Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y los países desarrollados para resolver la actual crisis financiera nivel internacional.
"El FMI decía que tenía una solución para todo, cuando la crisis estaba en Bolivia, Brasil, México. Cuando la crisis golpea a los países ricos el FMI se calla, entró en un profundo silencio. El BID, en tanto, no habla más de nada", criticó a Lula.
Lula dijo que las naciones desarrolladas deben seguir el ejemplo de Brasil en la lucha contra la crisis mundial y que no hay nada más "más fácil en el mundo y más barato que el cuidado de los pobres, lo que es difícil es cuidar de los ricos."
Para él, la distribución del ingreso permite que los pobres consumen y hace que la economía a su vez funcione, generando empleos e ingresos para los más ricos.
"Una familia pobre con $ 100 debe resolver sus problemas del mes. Para los ricos, un préstamo de 1.000 millones y todavía sale de su oficina a hablar mal del gobierno. Todo lo que se brinda en relación con los pobres se gasta, el aumento del salario mínimo se gasta, la transferencia de ingresos se gasta. Prestar a los ricos es inversión. Hemos cambiado eso, prestamos a los pobres".