Mensajepor Tecnicalpro » Mié Mar 07, 2018 1:34 pm
El Senado abrió el debate sobre financiamiento productivo
El Senado comenzó hoy a tratar el proyecto de ley de financiamiento productivo, iniciativa que ya fue aprobada por la Cámara de Diputados y que Mauricio Macri incluyó entre las prioridades del Gobierno en la agenda parlamentaria para este año.
La iniciativa fue puesta como prioridad en el temario de la Comisión de Economía Nacional de la Cámara alta durante la reunión constitutiva celebrada hoy y que sirvió para designar a sus nuevas autoridades. La radical Silvia Elías de Pérez (Tucumán) fue elegida presidenta.
Sin embargo, el debate del proyecto recién comenzará el próximo miércoles, cuando se espera la presencia de funcionarios del Poder Ejecutivo, de la Comisión Nacional de Valores (CNV) y de los invitados que propongan los senadores. El dictamen podría demorar un mes.
Si bien la intención del oficialismo es que el Senado la convierta en ley, Juan Carlos Romero (PJ-Salta) advirtió que al menos dos artículos de la iniciativa quedaron superados por la sanción, en diciembre, de la reforma impositiva. La radical Pamela Verasay (Mendoza) coincidió con la advertencia, pero reclamó buscar una fórmula para evitar que el proyecto vuelva, modificado, a la Cámara de Diputados.
En su discurso de apertura de las sesiones ordinarias, el jueves pasado, Macri reclamó la sanción del proyecto al asegurar que permitirá "seguir teniendo crédito hipotecario por varias décadas y va a dar más opciones para canalizar el ahorro de los argentinos, en especial a las Pymes, que necesitan capital para crecer".
El proyecto establece la obligación para las micro, pequeñas y medianas empresas de emitir la denominada "factura de Crédito Electrónico" en todas las operaciones comerciales con grandes empresas. Este instrumento les permitiría acceder, de manera más ágil, a nuevas líneas de créditos.
Al sistema financiero le da la posibilidad de fondear sus hipotecas a través de la securitización de las mismas, lo que les permitirá venderlas en el mercado financiero, mediante una "letra hipotecaria" que se ajustará por el CER, y así hacerse de fondos. Por último, el proyecto elimina la posibilidad de que la CNV pueda intervenir empresas, como lo hizo durante el kirchnerismo, modifica los mínimos y máximos de las multas por infracciones y amplía las facultades de supervisión del organismo.