Mensajepor Buffet » Jue Ago 09, 2018 11:09 pm
RESULTADOS ORDINARIOS
El resultado bruto del ejercicio finalizado el 31 de mayo de 2018 arrojó una ganancia de $885,7 millones, mientras que el ejercicio anterior arrojó una ganancia de $483,6 millones, lo que representa un incremento del 83%.
El resultado operativo del ejercicio finalizado el 31 de mayo de 2018 arrojó una ganancia de $351,4 millones, mientras que el ejercicio anterior arrojó una ganancia de $0,9 millones, lo que representa un incremento significativo que refleja el mejor desenvolvimiento del Grupo en este ejercicio.
El resultado del presente ejercicio ascendió a una pérdida de $1.220,9 millones, mientras que el ejercicio anterior arrojó una pérdida de $1.246 millones, producto principalmente de la fuerte devaluación acaecida durante este ejercicio.
El resultado integral del presente ejercicio fue una ganancia de $678,1 millones, frente a una ganancia de $145,1 millones en el ejercicio anterior.
Los ingresos de actividades ordinarias ascendieron a $5.147,5 millones, que representan un crecimiento del 20% sobre el ejercicio precedente, mientras los costos de ventas se incrementaron un 12%, permitiendo que el resultado bruto mejore en un 83% como se menciona en el primer párrafo.
En Celulosa Argentina, los ingresos por actividades ordinarias aumentaron un 27%, producto de la combinación precio, mix de ventas de la pulpa de mercado, papel de impresión y escritura, papel tissue, reventa de papel y diferencia de volúmenes observados entre ambos períodos en análisis. Mientras tanto, los costos de ventas aumentaron un 24%. Este aumento en los costos se originó por el incremento de mano de obra y sus cargas sociales, la incidencia de mayores costos de pasta y servicios comprados y contratados a terceros como consecuencia de la parada de planta programada realizada en el ejercicio, así como aumentos de precio de madera, químicos y combustible (gas y fuel-oil) e incremento de impuestos, gastos de mantenimiento y mayores cargos por depreciaciones, producto del cambio al modelo de revaluación practicado en determinadas líneas del rubro Propiedades, planta y equipo a partir del ejercicio finalizado el 31 de mayo de 2017.
La facturación de Fanapel consolidado de papel para impresión y escritura, estucados y no estucados, para este ejercicio, ascendió a $ 459,9 millones. El descenso de los montos facturados es consecuencia directa de la menor colocación de productos en los mercados regionales.
En Forestadora Tapebicuá, la facturación mostró un incremento del 31%, producto de los mayores precios de venta y del aumento de la demanda de productos como consecuencia de un crecimiento de la actividad de la construcción.
En tanto, en TC Rey, la variación fue un aumento del 149%, a partir de un mayor volumen de despachos forestales, dentro de esta variación también se registró un incremento en la facturación de productos de línea de madera sólida.
La ganancia por cambio en el valor razonable de los activos biológicos ascendió a $34,6 millones en el ejercicio finalizado el 31 de mayo de 2018, mientras que en el anterior ascendió a una ganancia de $42,7 millones.
Los costos de distribución y gastos de administración, en su conjunto, sólo aumentaron $34,8 millones respecto del ejercicio anterior, principalmente por incremento de sueldos y sus cargas sociales. Esta variación, se logró como consecuencia de la fuerte política de contención de gastos implementada durante el ejercicio por la Sociedad.
Los otros egresos arrojaron una pérdida de $54,9 millones durante el ejercicio finalizado el 31 de mayo de 2018, mientras que en el ejercicio anterior representaron una pérdida de $175,1 millones. Esto se debió principalmente, en este ejercicio, a la amortización del complejo industrial de Juan Lacaze (Fanapel) y, el año anterior, a los costos emergentes del acuerdo que reguló el cese de la relación laboral con el personal afectado a la operación de dicha fábrica, producto de su discontinuidad de actividades industriales.
Los otros ingresos arrojaron una ganancia de $49,2 millones, producto principalmente de la venta de materiales y materias primas de Fanapel.
Los egresos financieros arrojaron una pérdida de $479,9 millones durante el ejercicio finalizado el 31 de mayo de 2018, mientras que en el ejercicio anterior representaron una pérdida de $413,2 millones.
La diferencia de cambio neta arrojó una pérdida de $1.471,3 millones durante el ejercicio finalizado el 31 de mayo de 2018, mientras que, en el ejercicio anterior representó una pérdida de $ 267,6 millones, producto de la fuerte devaluación del peso argentino respecto del dólar estadounidense, producido durante el presente ejercicio.
La pérdida por deterioro de activos productivos asciende a $12 millones al 31 de mayo de 2018, mientras que al 31 de mayo de 2017 ascendió a $124,2 millones y corresponde al reconocimiento de menores valores en los inventarios y otros activos como consecuencia de la interrupción de las actividades productivas de Fanapel ya mencionado.
La pérdida por deterioro de valor de las propiedades, planta y equipos asciende a $13,9 millones al 31 de mayo de 2018 y a $462,8 millones al 31 de mayo de 2017 y corresponde a la desvalorización de las maquinarias y edificios afectados por el cese productivo de la planta de Fanapel.
La pérdida por deterioro de valor de las propiedades, planta y equipos reclasificados como mantenidos para la venta, al cierre del ejercicio en análisis, asciende a $30,6 millones y corresponde a la desvalorización de los bienes vendidos por la subsidiaria Iviraretá en marzo de 2018.
Al 31 de mayo de 2018, se registró un beneficio por impuesto a las ganancias de $408,3 millones, mientras que en el ejercicio anterior el beneficio ascendió a $149,3 millones.
Se registró un superávit por revaluación de propiedades, planta y equipos de $2.012,4 millones al 31 de mayo de 2018 y de $1.827,6 millones, al 31 de mayo de 2017, con una pérdida por impuesto a las ganancias de $324,9 y $570,2 respectivamente, tal como se comenta en el capítulo de variaciones de activo en el acápite siguiente.
Al 31 de mayo de 2018, se registró una ganancia por ajuste por conversión de sociedades controladas del exterior de $121,5 millones, mientras que en el ejercicio anterior se había registrado una ganancia de $133,6 millones.