Es un caso típico de despecho y delirio bursátil.
Explorando la etiología del asunto aparece como rasgo intrínseco la ambigüedad de género.
Una versión que proviene del Foro de Tavares identifica a tal sujetx indiferenciado con un tal Milonga desaparecido en acción(es).
Sin embargo ha perdurado en el caso en cuestión el fundamentalismo KK cuya máxima virtud es negar la realidad, justificar lo injustificable, distorsionar descaradamente los hechos y carecer convenientemente de la memoria que no les resulta redituable.
El diagnóstico no es alentador.
Él/ella/ellx ha abandonado la milonguex por un ritmo más acorde hasta que al banquero proletario Heller le escriban su propia canción con una tasa de retorno adecuada:
https://www.youtube.com/watch?v=rr8TuEtETDc