Buenas noches:
Esta semana estuve en una conferencia de un grupo de médicos de la UBA quienes están trabajando en un Plan de Salud de alcance nacional. La odea es que tenemos un sistema de salud muy fragmentado compuesto por hospitales públicos + obras sociales gremiales + las medicinas prepagas, donde muchas veces una misma persona aporta a más de uno de esos subsistemas. Ellos opinan que la salud en Argentina no es igualmente accesible a todos y que se debe ir a un sistema más equitativo y que el problema no es tanto de recursos $$$$ sino de organización.
Algunos ejemplos que recuerdo de lo que dijeron fue que en los años 40 la Argentina tenía el 2do. lugar en renta per capita y el segundo lugar en esperanza de vida en América Latina. Hoy seguimos siendo los segundos en renta per capita pero pasamos al séptimo en esperanza de vida aunque en valores absolutos hayamos mejorado la esperanza de vida de los años 40. Quién nos superó? Cuba, por ejemplo. Está segundo en esperanza de vida aunque está en el puesto 14 de renta per capita. Otro tema: la mortalidad infantil tuvo sus más fuertes disminuciones durante las décadas del 40 y del 70, épocas donde se hizo un gran esfuerzo en el tema.
Con respecto a la inequidad del sistema de salud, los aportantes a obras sociales gremiales y a prepagas tienen más oportunidades de acceder a la medicina preventiva que los que sólo disponen de hospitales para atender su salud. Otro problema, dijeron, es que el Estado no monitorea la calidad de la atención en salud que se ofrece en la Argentina, no sólo los hospitales o las obras sociales sino tambien cómo actúan las prepagas.
De estas y otras cuestiones hacen cargo a Manzur a quien tambien critica mucho un sector de científicos porque no apoya la producción pública de medicamentos como sí lo hicieron el ministerio de defensa y el de ciencia y tecnología.
Yo lo que escucho todo el tiempo es que a partir de 2003 recuperamos las políticas de Estado. Mi idea es que el Estado debe velar por el bien común y, en este sentido, dos áreas primordiales son salud y educación. Nos debería llamar la atención que luego de 8 años (no 1, ni 2, ni 3,
creciendo a tasas chinas la eficiencia de las prestaciones de salud y educación todavía disten mucho de la que nos merecemos. Se está invirtiendo mucha plata en ambas áreas pero no se notan mejoras sustanciales. Un ejemplo es la falta de interés del gobierno nacional por participar de los exámenes PISA que evalúán el aprendizaje de los alumnos.